La historia del txakoli esta asociada a los denominados “vinos de cosecha” y “tintos o blancos”. El cultivo de la vid en Bizkaia se documenta a… partir de la Alta Edad Media mediante ordenanzas concejiles que permiten roturar libremente las tierras para plantar vides y adquirir maderas para los emparrados.
Los siglos XVII y XVIII suponen un período de esplendor para el txakoli, especialmente en Bizkaia. La producción anual de txakoli en este territorio se situaba en 18.000 hectolitros mientras que en Gipuzkoa apenas se superaban los 3.200. La franja costera, las Encartaciones así como Bilbao y sus alrededores viven un desarrollo sin precedentes en cuanto a la producción de este vino.
“El txakoli ha sido el gran desconocido a pesar de que todo el mundo fuese consciente que ha existido. No sabría decir cuál ha sido el error, o si se puede señalar a responsables. Antiguamente eran bastante ácidos, ligeros y sin complejidad, pero afortunadamente, al igual que en otras zonas, se ha dado un cambio del que resultan txakolis muy interesantes”, comparte María José Huertas, sumiller de la Terraza del Casino y de Comer, que estudia incorporar su selección particular a la carta de vinos del restaurante.
Enólogos y sumilleres han unido sabiduría y trabajo para situar al txakoli en el lugar que se merece. Uno de ellos ha sido Mikel Garaizabal, autor de ‘Txakoli de Bizkaia. El viaje’, una guía que recibió el Premio Gourdmand en febrero de 2013, y que plantea una nueva manera de acercarse a este vino. Un pequeño libro de consulta, elaborado con gusto y cuidado, que ofrece un recorrido por los procesos de elaboración, las bodegas y las comarcas donde se elabora, los restaurantes y hoteles donde se sirve.
El Txakoli es un vino característico del País Vasco y puede definirse como un vino joven, fresco, afrutado y sensiblemente ácido, como consecuencia de las variedades de uva empleadas ydel microclima existente en la zona. Todo ello confiere a este vino una personalidad propia, por lo que se encuentra entre los productos mas tradicionales de Euskal Herria.En los últimos años ha despertado un alto interés por parte del consumidor. Este interés se ha visto apoyado por diversas entidades tanto públicas como privadas, propiciando de este modo un aumento de la superficie cultivada de viñedos.
Las técnicas de elaboración artesanales han dado paso a procesos de caracter mas industrializado aunque persiste una gran variabilidad en los sistemas de elaboración.
Hoy en dia existen dos Denominaciones de Origen que se asocian a Gipuzkoa y Bizkaia respectivamente. La primera incluye la zona de Zarauz y Getaria, que obtuvo en 1989 la Denominación de Origen Getariako – Txakolina, con 95 Has de viñedo (17 bodegas: 10 en Getaria, 6 en Zarauz y 1 en Aia) y una producción de alrededor de 600.000 litros. La segunda está mas extendida pudiéndose destacar dos subzonas, la de la costa que engloba a las comarcas de Uribe Costa y el Txori Herri y tiene a Bakio como municipio representativo y la zona que abarca los valles del Nervión y Cadagua destacando la comarca de las Encartaciones.
La denominación de origen vizcaína es posterior a la guipuzcoana y fue publicada en el Boletin Oficial de Pais Vasco en Junio de 1994 como » Bizkaiko Txakolina- Chakoli de Bizkaia«. En total existen en Bizkaia 130 Has de viñedo de las cuales 85Ha están inscritas y controladas por el Consejo Regulador estando repartidas entre 170 productores y 60 bodegas. Hoy en dia se tiende al cooperativismo al objeto de mejorar la rentabilidad. La vid se cultiva en suelos resguardados por los vientos del norte y buscando siempre zonas de máxima insolación para conseguir la maduración de las uvas. El Txakoli es un vino de una graduación moderada entre 9 y 11 grados como corresponde a los vinos atlánticos en consonancia con la temperatura y el grado de humedad de la zona. En cuanto a su color dependerá del tipo de txakoli al que nos refiramos pudiendo ser: Tinto, blanco o rosado llamado tambien «ojo de gallo».
Las variedades de uva utilizadas son preferentemente las autóctonas esto es Hondarrabi Zuri para el Txakoli blanco y Hondarrabi Beltza para el tinto, calificada por el reglamento como variedad preferente si bien se utilizan tambien otras variedades. La denominación de origen Bizkaiko Txakolina incluye además en su reglamento la variedad Folle Blanche y elabora los tres tipos de vino mientras que la Denominación de Origen Getariako Txakolina se destaca por el Txakoli blanco. El consumo de Txakoli está en auge. Es un vino fácil de tomar en consonancia con las tendencias actuales de beber vinos ligeros, frescos y afrutados. Va bien con todo tipo de mariscos, entrantes y pescado. Así lo corroboran los grandes cocineros vascos que lo aconsejan en sus cartas de restaurantes. Es un vino de año por lo que se recomienda tomarlo en el año de su cosecha. No es un vino que se deje envejecer en bodega. El Txakoli aparece en escena cada año para la fiesta de Santo Tomás degustándose de forma especial en su feria agrícola. La mayoria de la producción se consume en las comarcas costeras siendo el 10% de la producción txakolinera la que se destina a la exportación. Actualmente se están plantando nuevas viñas y se espera que aumente la producción cuando las vides jóvenes empiecen a dar su fruto ya qu deben pasar tres años desde la plantación para que una cepa ofrezca uvas de calidad.